Hace 4 años

¿Será acaso que todos somos Quijote y Sancho a la vez?

Somos Quijote, al momento de perder la cabeza por ese alguien que tal vez nunca llegará.

Somos Quijote, vamos montados sobre una flaca esperanza, montados en lo más raquítico del corazón, aferrados a la batalla, trotando por la vida.

Eres Quijote al aventarte a la aventura, al emprender la marcha, armado solo de ilusiones y espejismos, al salir a la mas memorial de tus batallas, sin rumbo, sin saber la dirección que vas a seguir.

Soy un Quijote, al pelear con mis propias fantasías, al hacer de cada obstáculo un enemigo, al imaginar cosas que no son.

Somos Quijote al tener enemigos, hechiceros malditos que van haciendo de nuestro camino un infierno.

Somos Quijote al tener solo en mente la dulce presencia de ella, el dulce olor, el dulce recuerdo, la dulce necesidad, ¡¡oh Dulcinea donde estas?¡¡¡


Soy un Quijote.
Somos Quijote.

“Sábete Sancho que uno no es mas que otro, sino hace mas que otro”

Somos Sancho, al querer salvar lo insalvable.

Somos Sancho, al perseguir la locura, ir tras de sus pasos ciegamente.

Eres Sancho, al escudar la derrota, defendiendo lo abatido, protegiendo lo deshecho.

Soy un Sancho, siempre queriendo ver lo inexistente, siguiendo la fantasía de ganar una batalla que jamás será librada, llorando por una derrota que nunca va a venir. Derrotado por la nada.

Soy un Sancho.
Somos Sancho.
Somos Quijote.